Etiquetas

sábado, 16 de noviembre de 2013

Otro solomillo, pero esta vez con Coca Cola® y un toque Napoleónico

Hoy, como ya ha llegado el frío y no para de llover, me he metido de lleno en los fogones para hacer una receta, parecida a la última que publiqué y que no tiene nada que envidiarle.

Esta receta la hizo Pablo Saenz de Tejada una noche en el Txoco del que somos cofrades y me gustó por su sencillez y su porque es un éxito allá donde la preparas.

Necesitaremos para cuatro personas:

Un par de solomillos de cerdo, preferiblemente ibérico.
Dos sobres de sopa de cebolla deshidratada de cualquier marca. Yo he usado Knorr pero también vale la Hacendado
Dos latas de Coca Cola® normal, no valen la light o la zero.

En una cazuela ancha y baja ponemos a calentar un fondo de aceite de oliva.

Comenzamos salpimentando y sellando los solomillos que una vez sellados retiramos.


Bajamos el fuego y cuando haya perdido temperatura, añadimos los dos sobres de sopa de cebolla sobre el aceite.


Dejamos que se rehogue un poco la cebolla y cuando esté añadimos los dos botes de Coca Cola® y dejamos reducir.

Hasta aquí, la receta normal. En este momento he cogido una botella de Cognac Napoleon que tenía por casa y le he añadido un buen chorro (esto es cosa mía) y dejamos que también evapore el alcohol.
Añadimos en este momento los dos solomillos de nuevo y, a fuego lento, damos la vuelta cada cinco minutos hasta un total de veinte minutos dependiendo de lo hecha que os guste la carne. Con veinte minutos es suficiente.

Se deja enfriar la carne y se mantiene caliente la salsa. Se corta en rodajas de un dedo más o menos y se sirve con puré de patatas, una verdura o setas que estamos en temporada y la propia salsa



No hay comentarios:

Publicar un comentario